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21 de junio de 1946
Inédito, Algunas fechas de la vida de san Josemaría
El Fundador está de paso en Barcelona con rumbo a Roma. Es la primera vez que se traslada a Roma, y ha sido a petición de don Álvaro que le ha dicho que ya no puede hacer más para gestionar la aprobación de la Obra. Un alto prelado de la Santa Sede le ha dicho a don Álvaro: "ustedes han llegado con un siglo de anticipación". Por la mañana de este día, el Padre dirige la meditación en el oratorio del Centro de la calle Muntaner (al que se le llamaba “La Clínica”), y en la que repite varias veces aquellas palabras de san Pedro en el Evangelio: Ecce nos reliquimus omnia et secuti sumus te..!. "¡Señor, ¿Tú has podido permitir que yo, de buena fe, engañe a tantas almas?! ¡Si todo lo he hecho por tu gloria y sabiendo que es tu voluntad! ¿Es posible que la Santa Sede diga que llegamos con un siglo de anticipación...? Ecce nos reliquimus omnia et secuti sumus te!... Nunca he tenido la voluntad de engañar a nadie. No he tenido más voluntad que la de servirte. ¿Resultará entonces que soy un trapacero?".
Reza después ante la Virgen de la Merced y, por la tarde se embarca -con don José Orlandis- rumbo a Génova para ir a Roma por primera vez con el fin de conseguir la aprobación de la Obra por la Santa Sede. En el Colegio Mayor Monterols de Barcelona se conserva el sagrario, altar, retablo y candelabros que se encontraban en el oratorio de Muntaner.